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Depresión mayor: todo lo que necesitas saber

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Persona con síntomas de depresión mayor.

Tiempo de lectura: 7 minutos

La depresión clínica, depresión mayor o trastorno depresivo mayor es una condición de salud mental que afecta entre el 5 y 17% de las personas en algún momento de su vida. Este trastorno puede llegar a ser muy grave, ya que un gran porcentaje de quienes lo padecen mueren por suicidio.

En este artículo explicamos qué es la depresión mayor, cuáles son sus síntomas, qué hacer si se padece de esta condición y qué se puede hacer para prevenirla. 

¿Qué es la depresión mayor?

La depresión o trastorno depresivo mayor es un trastorno del estado de ánimo que, según Medline Plus, interfiere con la vida diaria, debido a los sentimientos de tristeza y frustración que genera. La mayoría de las veces, las personas con depresión pierden el interés en realizar cualquier tipo de actividad, y algunas veces pueden sentir que no vale la pena vivir.

Hay que resaltar que no se trata de una tristeza pasajera, y que las personas no pueden recuperarse de este trastorno de un momento a otro. En muchos casos, los especialistas recomiendan el consumo de ciertos medicamentos y psicoterapia para superar la depresión.

Trastorno depresivo mayor según el DSM-5

Según el Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (DSM-5) el trastorno depresivo mayor, o depresión, se caracteriza por prolongarse en el tiempo y por la presencia de síntomas como fatiga o pérdida de energía, disminución de la capacidad para pensar o concentrarse y pensamientos suicidas, entre otros más. 

Diferencia entre depresión y depresión mayor

Mayo Clinic señala que la depresión puede variar en función de su gravedad, desde episodios temporales hasta cuadros de depresión graves y persistentes. La depresión mayor o depresión clínica, como también se le conoce, presenta síntomas más intensos, que provocan problemas en todos los ámbitos de la vida de la persona, desde las relaciones personales hasta sus actividades cotidianas.

Es decir, la diferencia está en que la depresión es una categoría general, mientras que la depresión mayor es un tipo de depresión más grave

Síntomas de la depresión mayor

Los síntomas de la depresión mayor varían en función de la edad, y pueden ir desde sentimientos muy profundos de tristeza hasta niebla mental, problemas de memoria y dolores físicos.

En los niños y adolescentes puede consistir en tristeza, irritabilidad, sentirse inútil, tener un bajo rendimiento en la escuela, autolesionarse o perder el interés en cualquier actividad. En el caso de los adultos, puede haber pérdida del apetito, problemas de sueño, pérdida del interés en el sexo y pensamientos o sentimientos suicidas

Causas y factores de riesgo

El artículo de Medline Plus que citamos antes señala que aún se desconocen las causas exactas de la depresión, aunque existen algunos factores de riesgo muy importantes. Generalmente, la depresión mayor se asocia a cambios químicos en el cerebro, factores genéticos o hereditarios, y vivir algunos hechos estresantes o traumáticos.

Factores biológicos y su impacto

La Cleveland Clinic explica que las personas que tienen un familiar de primer grado con depresión clínica, tienen un riesgo tres veces mayor de desarrollar un trastorno depresivo mayor que las personas que no tienen antecedentes familiares de esta enfermedad.

La genética puede causar desequilibrios químicos que afectan algunos neurotransmisores como la serotonina, la dopamina y la noradrenalina, que afectan el estado de ánimo y las emociones.

Si te interesa proteger tu salud mental, te recomendamos leer nuestro artículo sobre el deterioro cognitivo leve.

Factores psicológicos y sociales

Algunos factores psicológicos y sociales también influyen en la prevalencia del trastorno depresivo mayor. El artículo de la Cleveland Clinic que tomamos como referencia señala que algunas experiencias traumáticas como el abuso pueden ser un desencadenante de esta condición en el largo plazo.

A esto se suma también algunos acontecimientos estresantes que se presentan en la vida, como la muerte de un ser querido, un divorcio y el aislamiento. Tener baja autoestima y una percepción negativa de sí mismo también puede influir en el desarrollo de la depresión mayor. 

Factores biológicos de la depresión mayor.

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Diagnóstico de la depresión mayor

Hacer el diagnóstico de una persona con depresión mayor es sumamente importante, ya que permite abordar la situación de forma temprana y brindar opciones de tratamiento para superar este trastorno.

Herramientas y métodos de diagnóstico

Un artículo titulado Major Depressive Disorder advierte que no hay una prueba específica para diagnosticar la depresión mayor, aunque en la mayoría de los centros hospitalarios se utiliza un instrumento de 9 preguntas llamado PHQ-9, con el que se puede hacer un diagnóstico para detectar la depresión, según los criterios del DSM-5.

Esta herramienta tiene una escala que va del 0 al 27, y las puntuaciones superiores o iguales a 10 son un indicador de que la persona puede tener un trastorno depresivo mayor.

¿Qué hacer si tengo depresión mayor?

En un artículo en el que explicamos cómo ayudar a una persona con depresión compartimos una serie de estrategias que te pueden resultar muy útiles si padeces de este trastorno de salud mental.

Lo más importante es buscar ayuda profesional tan pronto como sea posible, ya que así se puede determinar la gravedad de la depresión y obtener recomendaciones sobre el tratamiento que se debe seguir. Además, es importante tener un estilo de vida saludable, buscar grupos de apoyo, y mantenerse cerca de amigos y familiares

Tratamientos para la depresión mayor

Los tratamientos para la depresión son muy variados, pero suelen incluir el consumo de antidepresivos, algunos medicamentos específicos y la psicoterapia. Ten presente que solo un especialista puede hacer el diagnóstico y recomendar una medicación específica, evita la automedicación, ya que puede ser contraproducente.

Antidepresivos y otros medicamentos

Los antidepresivos forman parte del tratamiento recomendado por los especialistas para superar la depresión. Según John Hopkins Medicine, estos medicamentos actúan sobre las sustancias químicas del cerebro, y pueden tardar entre 4 y 8 semanas en hacer efecto.

Aunque todos los antidepresivos han demostrado ser efectivos, lo mejor es consultar a un profesional de la salud para determinar cuál de ellos se debe consumir. La lista de antidepresivos es muy amplia e incluye inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, moduladores de la serotonina, inhibidores de la monoaminooxidasa y algunos antipsicóticos y estabilizadores del estado de ánimo.

Es importante que investigues para qué sirve la serotonina, ya que así podrás entender mejor cuál es la función de estos medicamentos que recién mencionamos.

Terapia cognitivo-conductual

La terapia cognitivo-conductual complementa el tratamiento con medicamentos, ya que se centra en cambiar los patrones de pensamiento negativos que pueden contribuir al desarrollo de la depresión mayor. De igual manera, con este tipo de terapia se trabajan las habilidades para gestionar el estrés y para relacionarse con otras personas.

Terapia interpersonal

Este tipo de terapia, como se puede deducir por su nombre, aborda los problemas interpersonales del paciente con depresión, y resolver los conflictos que pueden contribuir a que esté deprimido. Esta terapia, desarrollada por Gerald Klerman, se basa en la premisa de que las relaciones y los eventos de vida impactan significativamente en el estado de ánimo.

Nuestro artículo sobre la musicoterapia y Alzheimer te puede ayudar a comprender de qué manera este tipo de terapias, en las que no se hace uso de medicamentos, influyen en el bienestar y la salud mental de las personas. 

Estrategias para prevenir la depresión mayor.

Prevención y manejo de la depresión mayor

Aunque la depresión mayor es un trastorno de salud grave, existen un gran número de estrategias que te pueden ayudar a prevenirla, o controlar sus síntomas en caso de que lo padezcas.

Estrategias para prevenir episodios depresivos mayores

Aunque no hay un método que asegure la prevención del trastorno depresivo mayor, algunas estrategias como las que publicamos en nuestro artículo sobre cómo combatir el estrés, mantenerse cerca de familiares y amigos en los momentos de crisis pueden ser de mucha ayuda. Además, se recomienda recibir tratamiento tan pronto como aparezcan los primeros síntomas.

¿Cómo mejorar el estado de ánimo y mantener la estabilidad?

Como ya mencionamos, no hay una fórmula secreta para mejorar el estado de ánimo. Sin embargo, tener una dieta equilibrada, con alimentos buenos para el cerebro; practicar suficiente actividad física durante el día; y evitar el consumo de sustancias como alcohol, tabaco y drogas, te puede ayudar. 

Preguntas frecuentes

Si tienes dudas sobre la depresión, y aún no entiendes qué experimenta una persona al tener este trastorno, o durante cuánto tiempo se pueden mantener los síntomas, seguir leyendo te puede ser de mucha ayuda. En este apartado profundizamos en el tema, respondiendo algunas preguntas frecuentes de quienes padecen de depresión y del público en general.

¿Cuánto dura la depresión mayor?

La duración de la depresión o trastorno depresivo mayor varía de una persona a otra, y está vinculada a las causas subyacentes. Esta condición de salud mental se puede prolongar desde semanas hasta meses y años.

En este sentido, el tratamiento juega un papel muy importante, ya que las personas pueden experimentar una mejora significativa en los síntomas en muy poco tiempo.

¿Qué siente una persona con depresión mayor?

Una persona con depresión mayor experimenta una profunda tristeza y desesperanza que no desaparece con el tiempo. Los sentimientos de vacío, falta de energía, baja autoestima y dificultad para disfrutar de las actividades que antes resultaban placenteras son comunes.

Algunas veces, las personas también se pueden sentir aisladas y pueden tener dificultades para conectar con los demás y para tomar decisiones.

¿Qué es la depresión extrema?

Aunque no existe el concepto de depresión extrema, se puede utilizar para hablar del trastorno depresivo mayor, que como ya mencionamos a lo largo del artículo, genera síntomas que son tan intensos que pueden incapacitar a la persona, impidiendo que lleve a cabo actividades básicas como comer, dormir o trabajar.