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Síntomas de cáncer de cuello uterino

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mujer diagnosticada con cáncer de cuello uterino

Tiempo de lectura: 7 minutos

El cáncer de cuello uterino es uno de los tipos de cáncer más comunes en todas las mujeres del mundo. Es por eso que la prevención, la concienciación y el conocimiento de esta enfermedad pueden resultar cruciales. A continuación, describiremos los síntomas del cáncer de cuello uterino, desde los más habituales a los más excepcionales.

De este modo, serás capaz de reconocerlo y acudir cuanto antes a un especialista. No obstante, es probable que asistiendo con regularidad a consultas ginecológicas, el médico pueda detectarlo a través de una simple citología.

Prevención del cáncer de cuello de útero

Sí, el cáncer de cuello de útero se puede prevenir. Es decir, es posible tomar algunas medidas antes de su aparición que podrán retrasarlo o lograr que no aparezca.

La mejor forma de prevenirlo es a través de la vacuna contra el virus del papiloma humano o VPH y hacerse todas las pruebas que sirven para detectarlo.

La segunda forma de prevenirlo es acudiendo con regularidad al ginecólogo y sometiéndose a citologías.

También una forma de prevención es limitar el número de parejas sexuales, ya que el VPH se suele transmitir a través de las relaciones sexuales.

En general, lo fundamental es la concienciación para el cáncer de mama, de útero, de vagina… para todos los cánceres ginecológicos, ya que tienen una alta tasa de supervivencia si son detectados a tiempo.

Prevención Primaria

La prevención primaria es aquella que evita la aparición del cáncer de cuello uterino. Para ello es indispensable el conocimiento sobre las infecciones de transmisión sexual (ITS) y las enfermedades de transmisión sexual (ETS). Asimismo, siempre que sea posible, es importante el uso del preservativo como barrera contra las ITS y ETS.

La vacuna del virus del papiloma humano o VPH es el mejor método de prevención. Usualmente se pone en niñas de 13 a 14 años para evitar la transmisión del virus a través de las relaciones sexuales. De ese modo no existirá riesgo de contagio.

Prevención Secundaria

La prevención secundaria es aquella destinada a una detección muy precoz. Es decir, una detección muy temprana que en la mayor parte de los casos evita la extensión del cáncer y los primeros síntomas de la enfermedad.

Por ello, no solo es necesario acudir a revisión ginecológica ante la aparición de síntomas, sino que es necesario hacerlo de forma periódica. Gracias a las citologías es posible detectar células alteradas (displasia) en fase muy temprana.

Día de la prevención del cáncer de cuello uterino

El 26 de marzo es el día de la prevención del cáncer de cuello uterino. Es un día para informar y concienciar a la población. Para ello, algunas asociaciones ofrecen charlas, dan boletines informativos e incluso crean recursos en internet para que exista un mayor acceso a la información.

El conocimiento y la prevención son piezas claves teniendo en cuenta que la supervivencia a cinco años del cáncer de cuello uterino es altísima cuando se detecta a tiempo.

Aunque es importante tener en cuenta que la edad es un factor crucial, pues las mujeres jóvenes tienen mayor porcentaje de supervivencia. También, el origen étnico es relevante pues se ha demostrado que las mujeres blancas tienen una tasa de supervivencia superior.

Todos los síntomas del cáncer de cuello uterino

Hay muchos síntomas distintos para el cáncer de cuello uterino. Algunos no pasan de leves molestias, por lo que suelen ser desatendidos. Otros, son más inusuales y llamativos, pero pueden estar relacionados con otras enfermedades.

Lo primero que debes hacer ante los primeros síntomas es acudir a consulta ginecológica.

Síntomas del cáncer de cuello uterino más comunes:

Hay muchos síntomas que pueden indicar que una mujer tiene cáncer de cuello de útero. Pero la mayoría de ellos pueden resultar irrelevantes y quedar desatendidos o ser confundidos con otros padecimientos o enfermedades como el vaginismo o los ciclos menstruales irregulares. Estos son los más habituales:

  • Sangrado vaginal después de mantener relaciones sexuales con penetración: en muchas mujeres este es el primer síntoma de cáncer de cuello uterino. Esto no significa necesariamente que la penetración sea dolorosa, simplemente será posible encontrar restos de sangre después de la actividad sexual. Muchas mujeres le restan importancia hasta que el sangrado aparece siempre.
  • Dolor durante la excitación y/o relaciones sexuales: algunas mujeres independientemente de que tengan sangrado o no durante las relaciones sexuales con penetración pueden sentir también dolor. Esto se puede producir durante el coito o incluso momentos antes, cuando las paredes del útero y la vagina se preparan para la penetración.
  • Sangrado vaginal después de la menopausia: algunas mujeres empiezan a experimentar los primeros síntomas de la menopausia cuando aún tienen sangrado. Esto es relativamente común y no debes preocuparte. Sin embargo, si llevas años sin sangrado vaginal y aparece de nuevo, debes consultar con tu médico lo antes posible.
  • Flujo vaginal con sangre y acuoso: otro posible síntoma es que junto con el flujo vaginal encuentres sangre. Este flujo por lo general es más líquido y menos viscoso de lo habitual, aunque dependerá de la fase del ciclo menstrual en que te encuentres.
  • Olor del flujo vaginal muy intenso: También que tu flujo mantenga la misma viscosidad y color, pero su olor se haya vuelto más intenso o incluso fétido es un síntoma del cáncer de cuello uterino.
  • Sangrado vaginal entre períodos menstruales: si a los 5, 10 o 15 días de haber terminado los días de regla vuelves a sangrar, debes acudir a tu ginecólogo. En ocasiones solo se trata de un ciclo irregular, pero también es uno de los síntomas más comunes del cáncer de cuello de útero.
  • Periodos de sangrado menstrual que superan los 6 o 7 días: hay mujeres que desde su primera menstruación tienen periodos de sangrado de una semana de duración, si ese es tu caso no debes preocuparte. Pero si siempre duraban menos de una semana y ahora superas los 9 o 10 días de sangrado, deberías acudir a un especialista, pues puede que se trate de un síntoma de cáncer de cuello uterino.

Si padeces uno o dos de estos síntomas y además han aparecido en más de una ocasión, debes consultar cuanto antes con un médico o pedir cita ginecológica. Es importante que se detecte lo antes posible.

Síntomas del cáncer de cuello uterino en estadio avanzado:

mujer con dolor abdominal

En ocasiones, el cáncer de cuello uterino puede trasladarse a otras zonas del cuerpo. Algunos de los síntomas de que el cáncer de cuello uterino se ha extendido son:

  • Dolor en el abdomen: puede ser de forma esporádica o muy continuada. En algunas mujeres es un dolor muy intenso y en otras puede ser solo una leve molestia.
  • Dificultad o dolor al evacuar: pudiendo incluso provocar heridas o estreñimiento durante varios días.
  • Sangrado del recto: con las evacuaciones pueden aparecer restos de sangre.
  • Hinchazón persistente en las piernas: no obstante, debes tener en cuenta que a partir de los 60 o 70 años las piernas se hinchan debido a otras complicaciones, por lo que no es un síntoma definitivo.
  • Dolor en la espalda: el dolor de espalda que se experimenta como causa del síntoma de cáncer de cuello uterino es diferente a aquel que proviene de lesiones, malas posturas o enfermedades degenerativas de los huesos.
  • Sensación de cansancio: no necesitarás más horas de sueño, sin embargo, es probable que te sientas sin energía o con poco interés por realizar actividades que requieran ejercicio o actividad física.

Es importante tener en cuenta que todos estos síntomas pueden ser también síntomas de otras complicaciones o enfermedades. Ninguno de ellos es una prueba definitiva de cáncer de cuello uterino en estadio avanzado.

Es importante consultar a un especialista e informar de estos y otros síntomas.

¿Cuándo consultar a un especialista?

Todas las mujeres a partir de los 18 años de edad o en el momento de comenzar las relaciones sexuales de forma periódica, deben acudir al ginecólogo mínimo una vez al año. Esto es importante para detectar cánceres ginecológicos y enfermedades de transmisión sexual. Gracias a esto, muchos cánceres ginecológicos son detectados antes de que la paciente muestre algún síntoma.

En los casos en los que la paciente lleve años sin acudir al ginecólogo es esencial acudir a consulta ante los primeros síntomas, especialmente si se observa más de un síntoma a la vez o si alguno de ellos aparece de forma frecuente.

Consultas ginecológicas

mujer en consulta ginecológica

En Bupa Salud ofrecemos consultas ginecológicas para hacer un seguimiento rutinario y de prevención de cánceres como el de cuello de útero, vagina, vulva…

Además, te podremos ofrecer información sobre sistemas de prevención, detección de los síntomas, etcétera.

En la actualidad, la cantidad y tipos de cánceres ginecológicos se encuentran en aumento, como el cáncer de mama. Por ello, la detección precoz es la pieza clave.

Tratamientos contra el cáncer

Asimismo, ofrecemos diferentes tratamientos contra el cáncer y en el caso de los cánceres ginecológicos podrás contar con un equipo de expertos e investigadores a tu disposición para que en todo momento te sientas atendida e informada. Te explicaremos y te ayudaremos a tomar las mejores decisiones para garantizar tu bienestar durante este proceso tan complicado.

Seguros de salud con cobertura mundial

Si eres nuestro asegurado, nuestros beneficios de póliza incluyen Procedimientos de diagnóstico para obtener información precisa y confiable sobre tu salud. Los métodos de diagnóstico abarcan pruebas de patología, exámenes de laboratorio, radiografías, resonancia magnética, tomografía computarizada, tomografía por emisión de positrones (PET scan), ultrasonido o endoscopia entre otras.

Las causas del cáncer de cuello uterino

No están muy claras las causas del cáncer de cuello de útero, esto dependerá de cada mujer y cada caso. Sin embargo, su relación es directa con el VPH, que es considerada la primera causa. De ahí la importancia de practicar sexo con protección o mantener relaciones únicamente con personas de quienes conocemos su salud sexual.

Otra de las causas, por supuesto, es genética y hereditaria. Se puede heredar la propensión de mutaciones del ADN de células de esta zona del cuerpo, y también contagiarse por otras infecciones de transmisión sexual que ayuden a desarrollar el cáncer de cuello uterino. También, el tabaquismo multiplica las posibilidades de padecerlo.

Conclusión

Hay muchos síntomas de cáncer de cuello uterino y es conveniente conocerlos todos, pues si se detecta a tiempo, el porcentaje de supervivencia a cinco años es muy alto, especialmente en mujeres jóvenes. Por esto, es crucial que acudas al menos una vez al año a tu ginecólogo y que te sometas a citologías.

También el conocimiento sobre sus síntomas y la prevención como la vacuna del VPH juegan un papel protagónico.