Emociones y cerebro: ¿cuál es la relación que existe entre las experiencias emocionales y la actividad cerebral?
Tiempo de lectura: 7 minutos
Para hablar de la relación entre emociones y cerebro, podemos resaltar que detrás de todas las experiencias emocionales, positivas y negativas, se encuentra el cerebro. Este órgano es el responsable de generar, procesar y regular las emociones.
A pesar de este papel tan importante, muchas personas desconocen cuáles son las áreas que intervienen en este tipo de procesos. Además, no entienden cuál es el impacto que pueden tener las emociones sobre el funcionamiento del cerebro.
En este artículo te hablaremos del papel del cerebro en las emociones y en el comportamiento, y de cómo las emociones pueden también alterar el funcionamiento del cerebro. Cuando termines de leer entenderás cómo funciona esta relación y cuáles son sus aspectos más importantes.
ÍNDICE
- Relación entre las emociones y el cerebro
- El sistema límbico y su papel en la regulación emocional
- Relación de la dopamina y la serotonina con las emociones
- La memoria y las emociones
- Importancia de las emociones para la plasticidad cerebral
- Consecuencias emocionales del estrés crónico
- Trastornos emocionales y su relación con el funcionamiento del cerebro
- Emociones y salud cerebral
Relación entre las emociones y el cerebro
Durante décadas, los especialistas que se dedican a la neurociencia han estudiado la relación que existe entre las emociones y el cerebro, tratando de descifrar cuál es el papel que juega el cerebro en la generación, procesamiento y regulación de las emociones.
Las emociones son un componente muy importante dentro de la vida de todas las personas, ya que pueden influir en las decisiones, en el comportamiento y en la forma en la que se interactúa con los otros.
De forma general, se puede decir que diferentes áreas del cerebro están involucradas en la respuesta emocional frente a la realidad, especialmente, el sistema límbico. En este sistema se encuentran la amígdala y el hipotálamo, que es considerado el centro emocional del cerebro.
La relación entre emociones y cerebro es bidireccional, porque el cerebro influye en la generación y regulación de las emociones, y estas también pueden afectar el funcionamiento del cerebro y algunas de sus funciones.
El sistema límbico y su papel en la regulación emocional
Como recién mencionamos, el sistema límbico es fundamental para procesar, interpretar y regular las emociones, bien sea que se trate de estímulos externos o internos. Es decir, este sistema, a través de sus diferentes partes, se encarga de darle un significado a las emociones y regularlas de acuerdo a un tipo de situación particular.
La amígdala, por ejemplo, se encarga de detectar los estímulos que pueden ser considerados amenazantes, y desencadenar una reacción de miedo o de ansiedad. Este proceso condiciona las respuestas emocionales, y prepara al organismo para reaccionar.
Dependiendo del estímulo, puede haber una respuesta fisiológica particular, como el aumento del ritmo cardíaco y la liberación de cortisol. De igual manera, hay que mencionar que es el sistema límbico el que se encarga de la memoria emocional, lo que ayuda a que las personas sepan cómo reaccionar o comportarse ante situaciones similares.
Relación de la dopamina y la serotonina con las emociones
Para entender la relación entre el cerebro humano y las emociones hay que hablar de la dopamina y la serotonina, dos neurotransmisores que transmiten señales entre las células nerviosas.
Con la dopamina, por ejemplo, se asocia a las experiencias experiencias satisfactorias, por lo que cada vez que el cerebro la libera, se refuerza el comportamiento. Por otro lado, la serotonina regula el estado de ánimo y la estabilidad emocional, y promueve la sensación general de bienestar.
Ambos neurotransmisores tienen una gran influencia sobre el sistema de recompensas, y están asociados a las emociones. Del nivel de dopamina y serotonina en el cuerpo dependen las respuestas emocionales y el estado de ánimo de las personas.
La memoria y las emociones
Si queremos hablar de la relación entre emociones y cerebro, es necesario analizar también el papel que tiene la memoria en la formación de los recuerdos emocionales. Esto es importante porque en función de esos recuerdos podemos reaccionar de una u otra manera ante cierto tipo de situaciones.
En este proceso, la encargada del almacenamiento y el procesamiento de las emociones en nuestro cerebro es la amígdala. De esta manera, sucede que todos los eventos que tienen una carga emocional positiva o negativa son recordados con más intensidad que los eventos neutrales.
Asimismo, tenemos que destacar el papel de la corteza prefrontal, que se encarga de interpretar las emociones asociadas a los recuerdos y de la regulación emocional consciente.
Importancia de las emociones para la plasticidad cerebral
Según un estudio publicado por el National Institute of Health de EE.UU., la forma en la que las personas regulan sus emociones a lo largo de su vida, termina impactando en el procesamiento neuronal, y puede influir en la estructura de ciertas regiones cerebrales.
Es decir, en este punto ya no hablamos exclusivamente del control de las emociones en el cerebro, sino de cómo la regulación de las emociones puede afectar al cerebro. Es decir, la relación bidireccional, tal como mencionamos al principio del artículo.
Estos procesos que afectan la plasticidad cerebral incluyen la capacidad de reconocer y comprender las emociones, así como regularlas y expresarlas de acuerdo a cada tipo de situación.
La práctica de algunas actividades de regulación emocional o el mindfulness pueden fortalecer las conexiones neuronales, y en algunos casos aumentar la densidad de la materia gris en áreas como la corteza prefrontal.
Consecuencias emocionales del estrés crónico
El estrés crónico está directamente relacionado con las emociones, por lo que también tiene un impacto significativo sobre el cerebro. Cuando una persona está expuesta a altos niveles de cortisol, puede tener problemas de memoria y de regulación de las emociones, ya que este neurotransmisor afecta el cerebro, sobre todo, el hipocampo.
De igual manera, la conexión entre la amígdala y la corteza prefrontal, encargada del control y la regulación de las emociones en el cerebro, se ve afectada cuando se atraviesa una situación de estrés crónico, lo que puede afectar el control de las respuestas emocionales.
Comprender la relación entre emociones y cerebro, y tener presente cuáles son los factores que pueden afectar la regulación emocional es sumamente importante, ya que nos da una mejor imagen de cómo funcionamos emocionalmente como seres humanos, y nos permite conocer el papel que tiene el cerebro en estos procesos.
Trastornos emocionales y su relación con el funcionamiento del cerebro
Los trastornos emocionales no solo afectan el estado de ánimo, sino que también tienen algunos efectos sobre el funcionamiento del cerebro. En las personas con trastornos como la ansiedad y la depresión se han descubierto cambios en la estructura y la actividad cerebral.
En muchos casos, la conexión entre las diferentes áreas del cerebro es menor, por lo que también resulta mucho más complicado llevar a cabo los procesos de control y regulación emocional. Los trastornos emocionales generan desequilibrios en neurotransmisores como la dopamina y la serotonina.
Para entender mejor esto, te explicaremos cuál es la relación que tienen trastornos como la ansiedad y la depresión con el funcionamiento del cerebro.
Ansiedad
La ansiedad es uno de los trastornos emocionales más comunes, y se caracteriza por generar una sensación de preocupación persistente en las personas.
Cuando la parte del cerebro que regula las emociones no funciona de la manera correcta, y la persona experimenta problemas de ansiedad, la respuesta ante las situaciones amenazantes o estresantes es desmedida, lo que puede interferir en la vida de la persona y en su bienestar.
Quienes estudian la relación entre emociones y cerebro, señalan que en muchas ocasiones la ansiedad se produce por problemas neuroquímicos, ya que el cerebro produce y libera menos serotonina de la que se necesita.
La serotonina tiene un papel muy importante en la regulación de las emociones, lo que afecta también la forma en la que se percibe y se responde ante las situaciones estresantes.
Depresión
Otro trastorno emocional que afecta a millones de personas en todo el mundo es la depresión, y quienes lo padecen pierden el interés en las actividades cotidianas, sienten que les falta la energía y tienen dificultades para concentrarse y llevar a cabo actividades muy demandantes.
Cuando explicamos en qué parte del cerebro se encuentran las emociones y cuáles son las áreas que tienen relación con la regulación de las emociones, hablamos de la amígdala, el hipocampo y la corteza prefrontal, áreas del cerebro que se ven afectadas por la depresión y que pueden sufrir algunas alteraciones.
Emociones y salud cerebral
Como pudimos ver a lo largo del artículo, existe una relación muy estrecha entre las emociones y la salud cerebral. Vale destacar que las emociones influyen sobre el estado de ánimo, y que también pueden alterar la química cerebral.
Es decir, las emociones pueden impactar significativamente en la salud y en el funcionamiento del cerebro. Cuando se trata de emociones positivas, se reconocen ciertos beneficios para la salud cerebral, como mejoras en las funciones cognitivas y el fortalecimiento de las conexiones neuronales.
Por otra parte, las emociones negativas, como mencionamos en el punto anterior, pueden causar desequilibrios químicos que afectan el funcionamiento del cerebro. El estrés crónico, por ejemplo, está vinculado al envejecimiento prematuro del cerebro, el deterioro cognitivo y el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas como el alzheimer.
En este sentido, es importante entender la relación entre emociones y cerebro, y tomar medidas para promover tanto la salud emocional como cerebral.